
En un plenario provincial, el gremio pidió soluciones urgentes ante la falta de personal, recursos y cobertura médica.

Redacción EL ARGENTINO
El Sindicato de Obreros y Empleados Viales de Entre Ríos (Soever) realizó un plenario de su Comisión Directiva Central con representantes de las seccionales, donde se abordaron temas clave que afectan el funcionamiento de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) y la obra social del sector. El encuentro fue presidido por el secretario general Juan Carlos Lallana y contó con la participación del titular de la DPV, Exequiel Donda, quien asistió al cierre del debate.
Durante la jornada se detallaron problemáticas que comprometen la operatividad de las zonales viales. La falta de personal, la escasez de equipamiento, demoras en la ejecución presupuestaria y la ausencia de indumentaria adecuada fueron los principales reclamos del gremio. Aunque se valoraron algunos avances en la reparación de maquinaria, se advirtió que los problemas estructurales persisten y dificultan el cumplimiento de tareas esenciales.
Uno de los puntos más sensibles fue la derivación de personal vial para realizar trabajos municipales sin convenios formales, lo que —según el sindicato— expone a los trabajadores a riesgos legales y desvía recursos que deberían destinarse al mantenimiento de caminos rurales. En este sentido, se exigió que cualquier tarea fuera del esquema habitual cuente con respaldo legal y se reclamó la regularización de los carnets de conductor, que actualmente no son emitidos por la DPV como documento oficial.
La situación de la Obra Social del Personal de la Actividad Vial (Ospavial) también ocupó un lugar central en el debate. La dirigencia presentó un informe que revela un déficit creciente, agravado por la inflación, la devaluación y los costos dolarizados de medicamentos e insumos. Aunque se garantizan prestaciones esenciales —como internaciones y tratamientos para enfermedades crónicas—, los fondos son insuficientes para cubrir toda la demanda.
El sindicato propuso aumentar el aporte solidario para sostener el sistema, apelando a la responsabilidad colectiva. “Esta situación la arreglamos entre todos o no la arregla nadie”, sintetizó la conducción del Soever, que destacó el esfuerzo solidario de los afiliados y trabajadores para mantener en pie el servicio médico.
Al cierre, el director de la DPV, Exequiel Donda, reconoció los planteos del gremio y explicó que se trabaja en una coordinación con municipios para mantener unos 4.000 kilómetros de caminos rurales recientemente inventariados, que se suman a los 26.000 ya bajo la órbita del organismo. Aclaró que la transferencia de tareas será voluntaria, mediante convenios específicos, y financiada por el impuesto inmobiliario rural y partidas presupuestarias diferenciadas.
“Vialidad es insustituible. El trabajo nos excede, pero es absolutamente necesario el servicio que presta”, afirmó Donda, quien además anunció gestiones para la compra de maquinaria, mejoras de infraestructura y la pronta solución al problema de los carnets. “Mi tarea es mejorar Vialidad”, concluyó.
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