La apertura de sobres será en febrero de 2026. El Gobierno busca renovar la hidrovía clave del comercio exterior con un esquema sin costo fiscal y riesgo empresario.
Redacción EL ARGENTINO
El Gobierno nacional oficializó el llamado a licitación para la concesión y modernización de la Vía Navegable Troncal (VNT), una infraestructura estratégica por la que circula más del 80% del comercio exterior argentino. La apertura de sobres fue fijada para el 27 de febrero de 2026, mientras que los pliegos ya se encuentran disponibles en la plataforma oficial Contrat.ar.
El proceso incluye una etapa previa de revisión técnica, ambiental y operativa, habilitada a partir de la Resolución Nº 61 emitida a comienzos de diciembre. Durante ese período se recibieron alrededor de 40 presentaciones de empresas, cámaras sectoriales, asociaciones civiles y particulares, cuyos aportes derivaron en modificaciones relevantes al esquema original.
Entre los principales cambios se destacan la reducción de la tarifa mínima, la reformulación del plan económico-financiero, ajustes en la cláusula de estabilidad tributaria y revisiones en distintos anexos contractuales. También se incorporaron mejoras técnicas vinculadas al dragado, el balizamiento, las batimetrías y el diseño de buques, además de una actualización de los plazos de renovación de boyas, con impacto directo en la seguridad y operatividad de la vía.
La licitación apunta a reactivar obras largamente postergadas, reclamadas desde hace más de una década por los sectores agroexportador, industrial y logístico. La eficiencia de la hidrovía resulta determinante para reducir costos, mejorar la competitividad y garantizar la fluidez del sistema productivo nacional.
La Vía Navegable Troncal cumple además un rol central en la integración regional, al conectar a la Argentina con Paraguay, el sur de Brasil, Uruguay y Bolivia, consolidándose como una de las arterias fluviales más relevantes de Sudamérica.
El diseño del proceso licitatorio fue elaborado a partir de instancias de articulación entre el Estado nacional, las provincias, el sector privado y los usuarios del sistema, mediante Mesas de Diálogo Interjurisdiccional y una audiencia pública ambiental. El objetivo, según se indicó, es otorgar previsibilidad, transparencia y consenso al nuevo esquema de concesión.
El llamado cuenta con respaldo técnico internacional, que avaló el procedimiento y estimó que al menos ocho grandes empresas internacionales estarían en condiciones de competir por la concesión.
El esquema elegido será de riesgo empresario, sin aval del Estado ni impacto fiscal. La inversión necesaria para modernizar la hidrovía quedará íntegramente a cargo del concesionario.