Un informe del CEPA revela el deterioro laboral y productivo en la provincia bajo la gestión de Javier Milei. Cierre de empleadores, caída del empleo estatal y contracción en sectores clave marcan el escenario económico.
Redacción EL ARGENTINO
El mercado laboral de Entre Ríos atraviesa un retroceso severo desde el inicio de la presidencia de Javier Milei. Según un estudio del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), entre noviembre de 2023 y junio de 2025 la provincia perdió 572 empleadores y más de 11 mil puestos de trabajo registrados, con impactos transversales en la mayoría de los sectores.
De acuerdo con datos de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT), la cantidad de empleadores con personal registrado pasó de 17.405 a 16.833, lo que representa una contracción del 3,3%. El rubro más golpeado fue Comercio, que cerró 145 firmas, seguido por Transporte y almacenamiento (-77), Alojamiento y comida (-73), Servicios profesionales (-71) y Construcción (-60).
En términos relativos, el retroceso fue más agudo en Servicios artísticos y culturales (-15,4%), Construcción (-11,5%) y Alojamiento y comida (-10,3%). El informe advierte que la mayoría de los cierres se dio en pequeñas y medianas empresas: el 99,7% correspondió a firmas de hasta 500 trabajadores.
El empleo registrado también se redujo drásticamente. En 19 meses se destruyeron 11.334 puestos de trabajo formales, lo que equivale a una caída del 4%. El ajuste más severo se produjo en el sector público: Administración, defensa y seguridad social perdió 45.468 empleos, un recorte del 37,1%, el mayor en décadas.
Otros sectores con caídas notorias fueron Construcción (-3.073 empleos, -36,6%), Transporte y almacenamiento (-2.482, -25,7%) y Agricultura, ganadería y pesca (-1.441, -7,8%). La contracción alcanzó tanto a empresas pequeñas como a grandes: el 50,2% de los empleos destruidos correspondió a pymes, mientras que el 49,8% se dio en compañías con más de 500 trabajadores.
No obstante, el informe identifica algunos sectores con crecimiento. Enseñanza registró una fuerte suba con 42.228 nuevos empleos (+158,1%), mientras que Comercio, Información y comunicaciones y Energía tuvieron avances moderados.
Las conclusiones de CEPA alertan sobre un proceso de desindustrialización y achicamiento del mercado laboral entrerriano. La pérdida de empresas y puestos de trabajo en actividades productivas estratégicas, sumada al ajuste en el empleo público, configura un panorama de contracción económica que impacta de lleno en las familias trabajadoras y en el entramado social de la provincia.