La enigmática desaparición de Benvenutto y las incógnitas de un caso que tuvo de todo

La desaparición de Omar Benvenuto es uno de los casos sin resolver en Entre Ríos. Es uno de los grandes misterios sin develar en el sur entrerriano. Qué pasó con este reconocido empresario que dejó abandonada su camioneta en el kilómetro 242 de la Ruta Nacional 12 y cruzó caminando hacia el otro lado de la ruta. Allí es donde se pierde todo rastro de este hombre que tenía 66 años el viernes 27 de octubre de 2017, cuando fue visto por última vez con vida.

Actualmente la causa se encuentra bajo la órbita del Juzgado Federal de Paraná, aunque es el Juzgado Federal de Victoria el que trabaja en la investigación, que fue creado luego de la desaparición de Benvenuto. Y es desde allí donde se trazan los diferentes lineamientos que todavía sostienen la teoría del secuestro.

“No hay nada probado de que haya una desaparición forzada de persona, pero estamos ante una posible privación ilegal de la libertad”, señaló una fuente de la investigación a EL ARGENTINO. Actualmente, se encuentra vigente el alerta azul de Interpol, que fue renovado en 2023 y se mantendrá hasta el 2029 de no surgir novedades. “Estas causas no se archivan. Permanecen abiertas y en trámite hasta que aparezca un nuevo dato”, se confió a este medio.

Es la División Antisecuestros de la Policía Federal Argentina la que se encuentra trabajando en una pericia telefónica, porque para los investigadores hay una sola hipótesis de lo que sucedió con Benvenuto y si bien no hay personas imputadas, “hay personas sometidas a la investigación”, porque según explicó la fuente judicial consultada, “han existido llamados telefónicos (extorsivos) a la familia”.

Pero lo cierto es que ya transcurrieron más de siete años desde que ese perro marcó el otro lado de la Ruta 12 como el lugar donde se perdió el rastro de Benvenuto y desde entonces el misterio se ha apoderado de esta causa que parece estar condenada al olvido.

La política y la primera línea

Benvenuto es oriundo de Pilar, provincia de Buenos Aires, pero desde hacía largo tiempo estaba radicado en Gualeguay, donde vivía su madre y donde se encontraba ese viernes 27 de octubre de 2017 cuando salió hacia la Ruta 12 con su camioneta.

Era de tardecita y la empleada de la madre lo acompañó con su bolso hasta su camioneta. Antes de despedirlo, el hombre recibió un llamado y respondió: “estoy yendo”. A los pocos minutos, lo registraron las cámaras saliendo de la ciudad hacia el norte. Al otro día, su camioneta estaba prolijamente estacionada, e intacta, a pocos minutos de la ciudad, sobre la banquina de la ruta 12, mirando hacia Gualeguay. Las huellas demostraban que, antes de detenerse, había girado en U.

Benvenuto era dueño de Inprocil: una empresa dedicada a la fabricación de tanques de GNC, que se encuentra en Gualeguay, ubicada en la Avenida Presidente Illia al 900. Lo que se había conocido en aquel primer momento era que Benvenuto quería comprar el terreno donde estaba la empresa y que ese día en que desapareció se dirigía hacia Gobernador Mansilla para una reunión en donde se iba a encontrar con su hijo, pero este hombre nunca llegó.

La investigación cayó en un primer momento en manos de la Justicia ordinaria. Fueron los fiscales Ignacio Telenta, que actualmente es Juez de Garantías en Gualeguaychú, y Agustín Giannini, los encargados de las primeras actuaciones.

Había mucho misterio, rumores y diferentes versiones. Incluso la investigación en un primer momento disparó para el sector político. Los fiscales requirieron allanamientos en la casa del ex senador gualeyo Hugo Lesca y del ex intendente Luis Erro, que originó un escándalo sin precedentes en la localidad y que terminó con la renuncia de Giannini y el alejamiento de Telenta.

Desde aquel día, y por un par de semanas, mientras se rastrillaba la ruta hacia Rosario del Tala con cientos de efectivos, y sobrevolaban la zona con helicópteros y drones, abundaron los datos falsos: que una enfermera había estado con él en Mansilla, que Erro y Lesca lo tenían en sus campos, que estaba en Paraguay, y que la familia había recibido un llamado de centroamericanos. Al mismo tiempo, trascendieron versiones sobre problemas en la empresa con uno de sus hijos, sobre sus intenciones de vender la firma, y sobre algunos vínculos de negocios en la zona norte de Buenos Aires.

Los desatinos de la Justicia, a propósito o sin querer, terminaron en escándalo, despidos, y con un supuesto llamado extorsivo, aunque llevaba desaparecido más de un mes. Esto último fue la excusa perfecta para que la causa pasase al Juzgado Federal de Paraná, a cargo del juez Leandro Ríos.

En una entrevista que el abogado de la familia Benvenuto, Esteban Español, brindó a Infobae un mes después de la desaparición, declaró: "Estamos frente a un secuestro extorsivo". “Desde el 1 de noviembre se empezaron a recibir llamadas y mensajes de texto reclamando una suma importante de dinero a cambio de la liberación de Omar", confirmó el letrado.

En ninguna de esas llamadas se recibió una prueba de vida, que es lo que la madre y los hijos de Benvenuto le pedían a los presuntos secuestradores a cambio de guardar silencio. Luego la familia decidió no esperar más esa prueba de vida que nunca llegó y se decidió hacer público lo que estaba sucediendo.

En esa ocasión, Español reveló que "los investigadores están convencidos que no se trata de un secuestro exprés típico de estos tiempos, con cobros de poco dinero e inmediatos, sino que estamos frente a una modalidad que incluye largos tiempos de cautiverio, tratativas que se interrumpen y se retoman y que por lo tanto demanda una organización importante". “No se trata de una banda de improvisados", agregó.

Español fue consultado por EL ARGENTINO y no confirmó que siga siendo el abogado de la familia: “se está por definir”; y prefirió no realizar declaraciones porque consideró que los únicos que podrían hablar son los familiares. “En lo que a mi respecta no tengo directivas de la familia en orden a efectuar declaraciones públicas”, expresó. Con información de EL ARGENTINO/Gualeguay21/Infobae)