Por Sandra Insaurralde
Celeste Brede es mamá, recicladora, cocinera y cooperativista. Su historia está marcada por el trabajo genuino, la organización comunitaria y el compromiso con el cuidado ambiental. Nacida y criada en Gualeguaychú, hoy integra espacios nacionales de representación cooperativa y acaba de ser nombrada síndica titular en la Federación de Cooperativas de Trabajo de la República Argentina (Fecootra).
“Soy mamá, lo cual es un rol que me llena de amor y desafíos constantes. Pero también tengo otras facetas que son parte importante de mi vida”, contó a El Argentino. Entre esas facetas, se destaca su militancia cooperativa: integra la Cooperativa Eco Gualeguaychú, dedicada al reciclado, y Tiempos de Sabores, una cooperativa gastronómica que nació en la post-pandemia. “Me apasiona el trabajo cooperativo. El cooperativismo me cambió la vida”, afirmó.
Iniciar en el mundo de la economía social
Su recorrido comenzó en 2014, cuando la necesidad la llevó a recolectar cartones con un carro por los kioscos del centro. “Vivía en un asentamiento con mi hija de cuatro años. Armé un carro y empecé a buscar cartones en un circuito de kioscos céntricos y bazares”, recordó.
En 2016 ingresó a Eco Gualeguaychú, donde conoció el cooperativismo y se apropió de esa forma de vivir con valores y principios. “Comencé a trabajar en un espacio organizado, con jornadas laborales de seis horas y un ingreso más estable. La cooperativa me brindó una oportunidad para mejorar mis condiciones laborales y encontré un sentido de pertenencia y propósito”.
Desde entonces, se formó en Economía Social y Economía Circular, y se desempeñó como referente provincial de cooperativas y grupos de recicladores. Además, certifica competencias laborales en el rubro de reciclado a nivel nacional, a través del Ministerio de Trabajo de la Nación. “Aprendí que los recicladores y recuperadores somos profesionales en lo que hacemos, y que nuestro trabajo tiene un impacto triple: social, ambiental y económico”, explicó. “Como recicladora, puedo decir que somos cuidadores y curadores ambientales. Evitamos que los residuos terminen en cuerpos de agua o enterrados, y contribuimos a la economía regional a través de la recuperación de materiales reciclables”.
En paralelo, Celeste se enamoró de otro rubro: la cocina. “La post-pandemia trajo el nacimiento de la Cooperativa Tiempos de Sabores, mi segundo hogar. Me enamoré de la forma en que habían logrado combinar su pasión por la cocina con un modelo de trabajo cooperativo y sostenible”, comentó. “Aunque venía del mundo del reciclado, esta nueva aventura me permitió descubrir un rubro completamente distinto”.
Entidades cooperativas de tercer grado
Su compromiso la llevó a representar a cooperativas en espacios de tercer grado. “Mi primera representación fue en Cooperar, una institución emblemática con décadas de compromiso en todo el territorio argentino. Fue un gran desafío personal, donde aprendí muchísimo”, comentó en diálogo con EL ARGENTINO. Allí se desempeñó como vocal del Consejo de Administración, participando en decisiones estratégicas para fortalecer el cooperativismo nacional.
“En los últimos años, hemos visto un crecimiento significativo en la participación del cooperativismo de trabajo en los espacios de toma de decisiones, lo que refleja un cambio positivo en la valoración y reconocimiento de este sector en la economía y la sociedad argentina”, analizó. “Esta creciente inclusión ha permitido que las cooperativas de trabajo tengan una mayor incidencia en las políticas públicas y en la construcción de un modelo económico más justo y solidario”.
El reconocimiento es para Gualeguaychú
Su reciente nombramiento como síndica titular en Fecootra es un reconocimiento a su trayectoria y al protagonismo del cooperativismo de la ciudad de Gualeguaychú a nivel nacional trabajado desde hace más de 20 años. “El nombramiento de síndico en una institución cooperativa es un proceso crucial que implica la designación de una persona para actuar como representante legal y defensora de los intereses de los asociados”, explicó.
“Me sorprendió gratamente que mi nombre fuera incluido en la lista de candidatos, considerando las cualidades y requisitos que se exigen para ocupar este cargo en una institución de tanto prestigio como Fecootra. Es un gran honor formar parte de este equipo y un compromiso que asumo con total responsabilidad, no solo en representación de Tiempos de Sabores, sino también del cooperativismo entrerriano”.
Desde su rol en comités de juventud y género, Celeste impulsa capacitaciones, redes de colaboración y espacios de formación. “Es clave compartir experiencias y conocimientos entre las cooperativas locales y nacionales. Una forma de hacerlo es a través de los encuentros y talleres donde aprendemos unos de otros y compartimos nuestras mejores prácticas”, señaló a EL ARGENTINO.
Destacó el trabajo del Cecoop, el centro educativo de Fecootra, que se adapta a las demandas emergentes de las cooperativas asociadas. “Ofrecemos asesoramiento y asistencia técnica en áreas como gestión y financiamiento, y se establecen redes de colaboración entre cooperativas para compartir recursos y oportunidades, que es esencial para fortalecer el entramado social e institucional”, explicó.
El presente del sector cooperativo
Sobre el presente del sector en Gualeguaychú, Celeste reconoció avances y desafíos. “Durante la gestión de gobierno anterior se priorizó el fortalecimiento de la economía social y el cooperativismo como herramientas para el desarrollo económico y social de la región”, recordó. “El nacimiento de la federación de cooperativas de trabajo, como Fecootrer, surge de esa búsqueda colectiva de fortalecer la posición en el mercado, mejorar su capacidad de respuesta, compartir recursos y conocimientos, pero también de consolidar la identidad cooperativa y los valores de la cooperación en la comunidad”.
Sin embargo, advirtió que “en la actualidad parece haber un cambio de enfoque; las cooperativas enfrentan desafíos como la falta de apoyo institucional y recursos limitados. También existen desafíos persistentes como la competencia desigual con empresas más grandes —y en el contexto actual, con productos importados— y la constante necesidad de mejorar la gestión administrativa”.
Aun así, destacó iniciativas recientes del Instituto Provincial de Cooperativas y Mutuales (Ipcym), como la creación del Consejo Consultivo a través del decreto Nº 248. “También se creó la Diplomatura de Gestión y Desarrollo de Cooperativas entre el Ipcym y la Facultad de Ciencias de la Gestión de Uader, que ya tuvo su primera clase. Es una diplomatura hecha a medida y necesidad del cooperativismo entrerriano, porque fue pensada conjuntamente con federaciones, confederaciones y demás instituciones sociales que representan al cooperativismo de nuestra provincia”, valoró. “Brinda a los miembros de las cooperativas la oportunidad de adquirir conocimientos y habilidades específicas para gestionar y desarrollar sus organizaciones de manera más efectiva”.
Finalmente, Celeste reivindicó el rol de las mujeres en el movimiento cooperativo. “Como mujer cooperativista, siento que estoy representando a muchas otras mujeres que también están involucradas en el movimiento cooperativo, que llevan muchos años actuando como nexo con sus comunidades y promoviendo la participación y el liderazgo femenino”, expresó. “Me parece que es fundamental promover la igualdad de género y la inclusión en la toma de decisiones”, concluyó la flamante síndica a nivel nacional de Fecootra.