Redacción EL ARGENTINO
Mientras el Gobierno celebra la desaceleración inflacionaria, una amplia mayoría de la población vive una realidad muy distinta: el 63,7% de los argentinos asegura que tiene dificultades crecientes para llegar a fin de mes, y el 89,3% reclama una mejora urgente en los salarios. Los datos surgen del último informe de la consultora Zuban Córdoba, que expone un deterioro profundo en las condiciones de vida y una creciente percepción de injusticia social.
La encuesta, realizada sobre 1400 casos en todo el país, evidencia que el malestar económico atraviesa a todos los grupos etarios, pero se acentúa entre las personas mayores: el 67,3% de los mayores de 60 años afirma no poder cubrir sus necesidades básicas con sus ingresos. Entre los adultos de 31 a 45 años, el 62,9% comparte esta situación, mientras que el 60,8% de quienes tienen entre 46 y 60 también enfrentan serias dificultades. Incluso entre los más jóvenes (16 a 30 años), el 44,9% señala que no llega a fin de mes.
Las cifras revelan que el ajuste económico no solo no ha sido parejo, sino que ha golpeado con más fuerza a los sectores vulnerables. Así lo percibe el 60% de los encuestados, quienes creen que la gestión de Javier Milei y su ministro de Economía, Luis Caputo, está “profundizando la desigualdad en la Argentina”. Solo el 37,1% rechaza esta afirmación.
En un clima de creciente incertidumbre, más de la mitad de la población (50,3%) expresó temor a perder su empleo o a sufrir una merma significativa en sus ingresos como consecuencia directa de las políticas oficiales. A esto se suma que el 57,4% no cree que “Milei y Caputo tengan todo bajo control”, en contraposición con un 35% que sí mantiene la confianza.
La caída en la imagen del Gobierno se refleja con claridad en otro sondeo de la misma consultora. El 56,8% rechaza abiertamente las políticas libertarias y un 57,5% tiene una imagen negativa del Presidente. Solo el 41,9% mantiene una opinión positiva sobre Milei, y el respaldo a su gestión se ubica en el 42,8%. En paralelo, el 53,6% se define como "antimileista" y apenas un 28,1% como "mileista".
El informe destaca, además, una señal de alerta para el oficialismo de cara a las próximas elecciones: el 52,8% de los consultados expresó su intención de votar en contra del Gobierno, mientras que apenas el 38,3% dijo que piensa “premiarlo con su voto”.
Más allá de los indicadores macroeconómicos que el Ejecutivo exhibe como logros, la percepción social revela una creciente distancia entre el discurso oficial y la vida cotidiana. Para el 55,4% de la población, el presidente representa “un riesgo para la sociedad”. Solo el 37,8% sostiene que "sigue siendo el cambio". La grieta, esta vez, se abre entre los números del mercado y los del bolsillo.