La funcionaria sostuvo que la pieza “cumplió con todos los requisitos formales” establecidos en el reglamento y que su postulación “fue correctamente presentada”.

Acosta explicó que la obra está compuesta por “bordados sobre tela que representan cuerpos queer, flores y palabras”, y que se trata de una pieza “procesual y en crecimiento”, desarrollada bajo el concepto de work in progress. Según detalló, el artista justificó que la obra se completa a medida que se agregan o modifican elementos, lo que constituye —según su mirada— una obra nueva y válida para concursar.

“La resignificación es una operación posible dentro del arte contemporáneo y utilizada de múltiples formas”, señaló Acosta, quien además destacó la trayectoria y profesionalidad del jurado integrado por Gabriel Benedetti (Entre Ríos), Jorge Tirner (Chaco) y Fernanda Toccalino (Corrientes). La convocatoria recibió más de 270 postulaciones, un número que la coordinadora calificó como una muestra del alcance federal del Salón.

Acosta también valoró las políticas culturales recientes de la provincia, como la realización del Encuentro Entrerriano de Artes Visuales, la apertura del Centro Experimental de Artes Contemporáneas AURA y la incorporación de la Sala Expandida en la Casa de la Cultura. “Estas acciones acompañan el trabajo de los artistas y favorecen el acceso del público a las producciones contemporáneas”, señaló.

El jurado respaldó su decisión

En un comunicado conjunto, los tres jurados defendieron la elección de la obra premiada. “Analizamos todas las piezas con la rigurosidad que corresponde. El artista presentó un texto claro sobre el procedimiento y sus intenciones”, afirmaron.

Indicaron que la obra de Kosiak les resultó destacada por “su lenguaje, su factura técnica y su evolución conceptual”. Además, sostuvieron que la pieza “funciona en otro tiempo, con otras características”, y plantearon un interrogante habitual en las prácticas contemporáneas: “¿Cuándo finaliza una obra?”.